(continúa, I parte)
El segundo día (27/12) fuimos a visitar las minas de plata de Tarnowskie Góry, más divertidas que las minas de sal de Bochnia, a las que fuimos hace un tiempo. Pudimos ver cómo trabajaban los mineros de los siglos XVI-XIX.
La sala de plata
Carlos agachando la cabeza para no hacerse daño ;)
Una de las enormes salas
Vagones para transportar la plata y los desechos
También dimos un paseo subterráneo en barco
La visita nos gustó mucho, tuvimos un guía muy simpático, un señor mayor que nos relató todos los detalles del trabajo en la mina, nos explicó curiosidades y contaba chistes para que no nos aburriéramos. Disfrutamos mucho de su compañía.
Cuando acabamos, nos dirigimos al monasterio de Jasna Góra (monte claro) en Częstochowa, donde se encuentra la famosa Czarna Madonna (Virgen Negra).
Unas de las entradas al Monasterio
Mosaico de la Virgen de Częstochowa
El gran órgano en la capilla de la Virgen
La imagen venerada
Ofrendas de los fieles cubren todas las paredes
Después de visitar diversas estancias del Monasterio, fuimos a comer y regresamos a Tarnowskie Góry, en donde nos esperaba una actividad nueva. Pero antes, nos calentamos al calor del fuego, mientras esperábamos a más gente:
Interior del Pałac Kawalera (demasiado frío para las fotos del exterior)
Y aquí estamos, preparados para la aventura y muertos de frío: ¡un paseo en trineo! Solo que en vez de caballos, renos o perros tirando de él, nos llevaba un tractor.
Tenemos las sonrisas congeladas, nos costaba hablar y todo...
Lo "divertido" era estar en el último trineo porque era donde más se sentían los movimientos y porque de vez en cuando volcaba, pero cuando nos tocó a nosotros lo pasamos muy bien hasta que finalmente acabamos en el suelo y Carlos cayó encima de mi rodilla, lo que me dejó un moretón enorme que aún no se ha ido. No quisimos repetir y le dejamos el sitio a más gente, jaja.
Volvimos a casa reventados y nos fuimos a dormir. Al día siguiente (28/12) teníamos que estar frescos...
Jugando con la reina de la casa
...porque nos fuimos a hacer snowboard a Eslovaquia. Estuvimos en el PARK SNOW Veľká Rača, en las montañas Kysucké Beskydy y la verdad es que fue un gran día, aunque no íbamos muy preparados. ¿Ya podemos decir que estuvimos en Eslovaquia? Mmm... Yo creo que no cuenta.
Preparados para la acción
Pasamos allí todo el día y volvimos a casa de Agnieszka a punto para cenar, preparar el equipaje y coger el tren de medianoche de vuelta a Poznań. Antes de eso, nos hicimos fotos con la familia porque queremos conservar la memoria de estos días para siempre.
La verdad es que no esperábamos pasar por una experiencia tan gratificante y todo lo que nos llevamos de esta familia son buenos recuerdos. Agnieszka casi no nos conocía y, al saber que los cuatro pasábamos las Fiestas en Polonia, decidió invitarnos para que no estuviéramos solos. Nos abrió las puertas de su casa y su familia hizo todo lo posible porque nos sintiéramos a gusto con ellos, y así fue. Es lo que decía de los polacos: cuando te dejan entrar en sus vidas, lo hacen de corazón.
No hay comentarios:
Publicar un comentario